La polémica está servida y con razón. Leyendo hace unas horas el Diario de Cádiz aparecía la noticia de que Agatha Ruiz de la Prada ha sido la encargada de realizar el trofeo de la próxima Vuelta a España 2011 al ganador del evento ciclista. En realidad casi todos los medios se hacen eco de este hecho. Y es que acaba de ser presentado por la dirección de La Vuelta y la sorpresa mayúscula ha sido al ver el resultado final: algo muy parecido al actual logotipo de la marca de helados Frigo (Ola en Portugal). Demasiado parecido.
El tema ha sido de los principales en Twitter a lo largo de la jornada y hasta el marido de Agatha, el periodista Pedro J Ramirez (director de El Mundo), ha tenido que salir en su defensa. Pero lo evidente es evidente.
Primeramente, creo que está totalmente equivocado el conceder un diseño así a una marca en lugar de una persona. Aunque esa marca, Agatha Ruiz de la Prada, lleve con este 3 años diseñando el maillot de la montaña del Tour de Francia (vaya complicación lo de los lunares...). Y es que lleva ya 30 años viviendo del corazoncito tanto en su medio natural, el diseño textil, como en otros donde no debería haberse metido como es el caso de este trofeo. Y el diseño del trofeo, a simple vista, parecería propia de un crío de corta edad dibujando con el dedo de témpera sobre una pared. Aunque si sigue así es porque venderá.
¿Y la culpa de quién es? Del la organización en este caso, por no contratar a un especialista o a un verdadero artista. Que en España tenemos de los mejores escultistas del mundo. Como diría Pilario Pino: ¡es espeluznante!
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